Walt Disney Co. aceptó esta semana que un tribunal decida sobre una demanda por homicidio por negligencia, presentada por un viudo en Florida, después de haber argumentado anteriormente que el caso pertenecía a un arbitraje porque el hombre se inscribió para una prueba del servicio de streaming Disney+ en 2019. La demanda fue presentada por el esposo de una mujer que murió el año pasado por una reacción alérgica después de comer en un restaurante del complejo comercial Disney Springs en Orlando.

“Creemos que esta situación justifica un enfoque sensible para acelerar una resolución para la familia que ha experimentado una pérdida tan dolorosa”, dijo Josh D’Amaro, presidente de Disney Experiences, a Reuters en un comunicado enviado por correo electrónico. “Por ello, hemos decidido renunciar a nuestro derecho al arbitraje y llevar el asunto a los tribunales”, añadió.

El caso comenzó cuando Jeffrey Piccolo, su esposa Kanokporn Tangsuan y la madre de esta comieron en el restaurante y pub irlandés Raglan Road el 5 de octubre de 2023, y supuestamente eligieron el restaurante porque tanto Disney como Raglan anunciaban que atender a personas con alergias alimentarias era una prioridad. A pesar de las supuestas garantías del camarero de que el pedido de Tangsuan no contenía alérgenos, la mujer tuvo una reacción alérgica aguda y murió de anafilaxia por niveles elevados de frutos secos y lácteos en su organismo, según la demanda presentada ante el tribunal del condado de Orange.

Según la demanda, en numerosas ocasiones les confirmaron que la comida era segura: “Cuando el camarero volvió con el plato de Tangsuan, algunos de los artículos no llevaban banderas sin alérgenos y Tangsuan y Piccolo volvieron a interrogar al camarero, quien, una vez más, garantizó que el plato que se le entregaba a Tangsuan no contenía alérgenos”. Poco después de terminar de comer, Piccolo volvió a su habitación de hotel mientras su mujer y su madre iban de compras. Tras separarse para ir a diferentes tiendas con la intención de reunirse después, Tangsuan se desplomó en el suelo de una tienda luchando por respirar, unos 45 minutos después de haber comido.

Tangsuan se autoadministró una inyección de epinefrina antes de ser trasladada al hospital, pero falleció. Según la demanda, el forense confirmó su muerte como consecuencia de una anafilaxia debida a niveles elevados de lácteos y frutos secos en su organismo. En su respuesta inicial en abril a la demanda, Disney no mencionó el arbitraje, sino que argumentó que no era responsable porque no tiene control sobre las operaciones o la gestión de Raglan y se limita a ser su arrendador. En otra presentación a finales de mayo, Disney ofreció una nueva defensa: que la demanda está sujeta a arbitraje sobre la base de la suscripción de Piccolo a Disney+, así como su uso del sitio web de la compañía en 2023 para comprar entradas para los parques temáticos.

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