A partir de esta semana, los influencers franceses se enfrentan a penas de prisión o multas importantes en virtud de la nueva legislación aprobada por el Parlamento el jueves, cuyo objetivo es tomar medidas enérgicas contra la publicidad no declarada y el fraude. El proyecto de ley, presentado como un esfuerzo para garantizar que las personalidades en Internet se enfrentan a las mismas normas de publicidad que los medios de comunicación tradicionales, se ha abierto camino en el Parlamento con el apoyo de todos los partidos desde marzo, culminando con una votación en el Senado el jueves.

“Se acabó la ley de la selva”, declaró Arthur Delaporte, del opositor Partido Socialista, promotor de la ley junto con Stéphane Vojetta, del partido gobernante Renacimiento. Se calcula que Francia cuenta con unos 150.000 influencers, muchos de los cuales tienen una audiencia modesta, pero algunos cuentan con millones de suscriptores y contribuyen a marcar tendencias en sectores que van desde la moda a los videojuegos, así que con esta normativa, Francia es ahora el primer país de Europa en regular el marketing de influencers en las redes sociales.

La nueva ley prohíbe a los influencers crear contenidos pagos para promocionar cirugías estéticas, sitios de apuestas deportivas en línea o productos financieros como las criptomonedas. Los influencers y las empresas a las que se sorprenda infringiendo la ley podrían enfrentarse a hasta dos años de prisión y EUR €300.000 (unos USD $330.000) de multa, además de ver potencialmente revocada su capacidad para publicar en plataformas, según el texto del proyecto de ley.

Hasta esta semana, ninguna ley francesa regulaba directamente la actividad comercial en las redes sociales, lo que dejaba a los consumidores expuestos a estafas y fraudes. A partir de ahora, los influencers deberán etiquetar todos los contenidos pagos, añadiendo advertencias adicionales si se utilizaron filtros o retoques en el contenido. La ley también cierra una laguna existente en lo que respecta a la publicidad en Internet, pues ahora, los creadores de contenidos tendrán que atenerse a la legislación francesa sobre publicidad cuando se trate de la promoción de productos y servicios.

Por ejemplo, los anuncios que promocionen refrescos o alimentos procesados tendrán que incluir un mensaje que recuerde a los consumidores que deben realizar actividad física, de forma similar a como se haría en televisión. El Senado aprobó la ley por unanimidad y entrará en vigor en las próximas dos semanas.

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