Juez desestima demanda por plagio en el caso de "Shake It Off" de Taylor Swift

Taylor Swift está fuera de peligro tras la demanda por derechos de autor presentada contra la superestrella del pop hace cinco años. Si bien recordamos, en 2017, los compositores Sean Hall y Nathan Butler presentaron una demanda por infracción de derechos de autor contra la cantante, reclamando que la letra del éxito de Swift de 2014 Shake It Off plagió la canción Playas Gon’ Play, escrita por Hall y Butler, lanzada por el grupo femenino de R&B 3LW en 2000.

La letra de Playas Gon’ Play, que alcanzó el puesto 81 en el Billboard Hot 100, incluía una frase similar a la canción de Swift: Players gonna play/Haters gonna hate, a lo que Taylor Swift respondió en su momento que la letra de Shake It Off fue escrita completamente por ella, y que nunca había escuchado el track referenciado por los demandantes. En agosto, Swift dijo que la pista se basó en sus experiencias con el “escrutinio público implacable de mi vida personal, reportes clickbait, manipulación pública y otras formas de crítica personal negativa”.

Swift dijo que sus padres no le permitieron ver Total Request Live de MTV hasta que tuvo alrededor de 13 años, y la canción apareció por primera vez en el álbum debut homónimo de 3LW cuando tenía 10 años.

Ahora, esta semana, un juez desestimó la demanda por infracción de derechos de autor presentada contra Swift. Un juez inicialmente desestimó la demanda en 2018, comentando que la letra era “demasiado banal” para ser robada, pero un panel de apelación devolvió el caso en 2019. Swift había solicitado previamente que se desestimara el caso, pero un juez se negó, citando el las canciones tenían “suficientes similitudes objetivas”.

Según documentos judiciales, el juez Michael W. Fitzgerald acordó desestimar la demanda a pedido de las partes del caso. Fitzgerald desestimó la demanda “con perjuicio”, lo que significa que la desestimación es definitiva y Hall y Butler no pueden volver a presentar la demanda por infracción de derechos de autor. Swift no es ajena a las reclamaciones de derechos de autor relacionadas con Shake It Off. En 2014, otro juez del Tribunal de Distrito de EE. UU. rechazó una demanda diferente del tema en la que el escritor Jesse Graham de Haters Gone Hate de 2013, afirmó que Swift robó su letra, y pidió USD $42 millones en daños.

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