Prada anunció el día de hoy la adquisición del 100% de Versace por un monto de EUR €1.250 millones. Este acuerdo marca un hito en la historia de Prada, siendo la compra más grande que ha realizado en sus 112 años de existencia. La operación tiene como objetivo fortalecer la posición de Prada en el mercado del lujo, permitiéndole competir más directamente con gigantes del sector como LVMH y Kering.

La unión de estas dos marcas legendarias del lujo italiano dará lugar a un grupo con una facturación anual superior a los EUR €6.000 millones. Este acuerdo también significa que Versace regresa a manos europeas después de haber sido controlada por la estadounidense Capri Holdings desde 2018. La transacción se espera que se complete en la segunda mitad de 2025, sujeta a las aprobaciones regulatorias necesarias.

Versace, fundada por Gianni Versace en 1978, ha sido una marca icónica en el mundo de la moda gracias a su estilo audaz y barroco. Sin embargo, en los últimos tiempos, la marca ha enfrentado desafíos financieros, registrando pérdidas en varios trimestres. La adquisición por parte de Prada busca revitalizar la marca y aprovechar su potencial, combinando su legado con la sólida plataforma que Prada ofrece.

El presidente y director ejecutivo de Prada, Patrizio Bertelli, expresó su entusiasmo por la adquisición, destacando el compromiso compartido con la creatividad y la herencia cultural. Bertelli también mencionó que Prada está bien posicionada para escribir un nuevo capítulo en la historia de Versace, aprovechando los valores del grupo y continuando con determinación.

Así que la adquisición de Versace por parte de Prada no solo refuerza la presencia italiana en el mercado del lujo, sino que también ofrece oportunidades para atraer a nuevos clientes. Versace, conocida por su estilo vibrante, complementará el enfoque minimalista de Prada, lo que podría ampliar su base de clientes y fortalecer su posición en el mercado global.

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