Este fin de semana se viralizó un vídeo de un hombre japonés que se gastó unos 2 millones de yenes (aproximadamente unos USD 14.000) en un disfraz realista de border collie porque quería parecerse a su raza de perro favorita. El hombre, identificado únicamente como Toko, contrató a una empresa japonesa llamada Zeppet, conocida por crear esculturas y modelos para películas y anuncios, para crear el disfraz. Al parecer, Zeppet tardó 40 días en confeccionar el disfraz, ya que Toko pasó por múltiples rondas de pruebas y revisiones para conseguirlo.

“Lo hice de collie porque parece de verdad cuando me lo pongo”, declaró Toko en una entrevista al medio japonés Mynavi. “Mis favoritos son los animales cuadrúpedos, sobre todo los bonitos. Entre ellos, pensé que un animal grande y cercano a mí estaría bien, teniendo en cuenta que sería un modelo realista, así que decidí que fuera un perro”. Agregó: “Cumplí tal condición y mandé a hacer un collie, mi raza de perro favorita”.

Un empleado de Zeppet explicó cómo el equipo consiguió averiguar cómo la figura de un perro puede corresponderse con la de un humano. “La cuestión es que el esqueleto de un perro puede reproducirse en el de un humano. Como la estructura del esqueleto es muy diferente, pasamos mucho tiempo estudiando cómo hacer que se parezca al de un perro”, explicó el empleado al citado medio. “Además, recopilamos fotografías tomadas desde varios ángulos para poder reproducir el hermoso pelaje del collie e ideamos la forma de que el pelaje fluya de forma natural”.

El fin de semana vimos en las redes sociales un vídeo sacado de sus canales oficiales (@I_want_to_be_an_animal en YouTube) en el que aparecía con su disfraz de collie, dando un paseo al aire libre y observando las reacciones de los perros y de la gente. “¡Estaba nervioso por salir fuera, pero ha sido divertido!”, dijo el hombre, quien contó a Mail Online el año pasado que sueña con ser un animal desde que era “un niño pequeño”. “Creo que es un deseo de transformación”, dijo. “He pensado en ello desde que tengo uso de razón”.

A pesar de que muchos le dicen que muestre la cara que esconde bajo el disfraz de perro, Toko no piensa revelar su identidad humana a corto plazo, ya que cree que se enfrentaría a un juicio similar por parte de la gente con la que trabaja al que se ha enfrentado por parte de algunos usuarios en Internet. “No quiero que se conozcan mis aficiones, sobre todo por la gente con la que trabajo. Les parece raro que quiera ser perro”, dice. Sin duda, Toko recibió algunas reacciones de intriga, confusión y un poco de miedo de los perros mientras paseaba.. y también en Internet.

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